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viernes, 13 de marzo de 2009

La defensa culé tumbó al anfitrión

Como en el caso de Svensson con el Portland, la gran actuación de meta Kasper Hvidt fue básica para el triunfo del Barça en el otro cuarto. Era el derbi catalán y, pese al ardor del Fraikin y de todo Granollers, el archirrival acabó imponiéndose.
Un perfecto planteamiento táctico del técnico azulgrana Xavi Pascual, que contó con más efectivos y que le ganó la partida al vallesano Lorenzo Rueda, sirvió para que al final el marcador señalase un 30-25 que no reflejó la igualdad vivida durante muchos momentos. Tanto las defensas como los dos metas, Hvidt y el sueco Fredrik Ohlander, superaron a las primeras líneas rivales.
Aunque los azulgrana, con Mikkel Hansen demoledor desde los nueve metros, mandaron durante toda la primera mitad, logrando ventajas de hasta tres goles (6-3, m.11 y 12-9, m.24), las paradas de Ohlander y las exclusiones casi simultáneas de Boldsen y Nagy propiciaron el empate del Granollers (12-12, m.28), que llegó a ponerse por delante (14-13).
Pero el Barça se rehizo y ni el cambio de defensa local cambió ya el rumbo de un partido en el que el Barcelona acabó imponiendo su superioridad y su mejor fondo de banquillo.
La defensa culé tumbó al anfitrión

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